Ante los desafíos comerciales e industriales que la actual coyuntura de América del Norte presenta, con la amenaza de aranceles a diversos productos mexicanos por parte de Estados Unidos, la relocalización de las líneas de producción en México (nearshoring) sigue siendo un faro por la llegada de inversión extranjera que apuesta por esa zona, aunque especialistas han identificado retos y oportunidades para atender la demanda derivada de este fenómeno. En la región noreste, en estados como Nuevo León, Coahuila y Tamaulipas, la industria automotriz es uno de los pilares económicos que las firmas foráneas buscan desarrollar. En la presentación del foro El nearshoring en la economía global: Perspectivas y retos 2025, Paul Maya, director general de Atos para México y Centroamérica, y vicepresidente de la Cámara de Comercio e Industria Franco Mexicana (CCI France México) Capítulo Noreste, resaltó que los sectores manufactura y automotor tienen una importante presencia en esa zona del país. De acuerdo con CBRE, empresa enfocada al sector inmobiliario, durante 2024, en México la demanda de inmuebles derivado del nearshoring superó dos millones de metros cuadrados (m2) y la industria automotriz propició 39% de esa cifra; seguida de electrodomésticos y aparatos electrónicos. Maya puntualizó que empresas de los sectores como el retail, el automotriz y la manufactura aeroespacial también están invirtiendo en aquella zona del país. En cuanto al origen de los desembolsos, precisó que compañías de Francia, Corea, China, Alemania, España, Japón y Brasil se encuentran entre los principales inversionistas. Sobre los aranceles que busca imponer Donald Trump, presidente de Estados Unidos, señaló que de materializarse no sería benéfico para ningún país. En esa línea, consideró que la industria automotriz debe continuar con sus planes, es decir, que sigan las inversiones en el sector, para aprovechar la proximidad geográfica que México tiene con el mayor mercado consumidor del mundo. En conferencia para dar a conocer el programa del foro que se llevará a cabo el 13 de marzo en Monterrey, Nuevo León, organizado por la Cámara de Comercio e Industria Franco Mexicana Capítulo Noreste, Paul Maya identificó que uno de los principales retos para que se logre el nearshoring tiene que ver con la parte de infraestructura, con el abastecimiento de energía eléctrica, agua y de las vías carreteras; además, la mano de obra. Ante los temas coyunturales, el especialista indicó que México debe fortalecer su relación con la Unión Europea y que las inversiones de países como Francia y Alemania continúen. De acuerdo con la Secretaría de Economía (SE), en 2024 México recibió 36 mil 872 millones de dólares (mdd) de Inversión Extranjera Directa (IED), lo que representó un incremento de 2.3% respecto a 2023, cuando fue de 36 mil 058 mdd, alcanzando un nuevo máximo histórico. De acuerdo con la dependencia federal, Estados Unidos se mantuvo como el principal socio inversionista en México con 45% de los flujos totales con 16 mil 513 mdd. Le siguieron Japón con 12%, Alemania con 10%, Canadá con 9% y Países Bajos con 5 por ciento. Dichas inversiones podrían verse afectadas ante la política proteccionista que busca imponer Donald Trump con la aplicación de aranceles del 25% a diversos productos mexicanos, y una tasa similar a la importación de acero y aluminio de México y Canadá, así como de otros países, además de que incidiría en la integración comercial de América del Norte y en la próxima revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), prevista para 2026.
